Marca la necesidad de elegir entre dos opciones. Representa a Venus en Tauro y la letra hebrea Vau. Muestra el misterio de la causa que propició la acción, para que ésta sea eficiente. Determina la Ley Natural y la posibilidad de distinguir el camino del bien y el del mal. Es la virtud y el vicio en cualquier acción significativa. Nos ofrece el conocimiento intuitivo en el terreno espiritual, para que a través de él, podamos distinguir qué es lo correcto y qué lo incorrecto. Simboliza la conciencia gobernada por una Ley Moral que le da el significado exacto a los actos.
En el terreno mental, indica el derecho y el deber como impulso eficiente para concretar todos nuestros deseos. Es la vacilación entre mantener la abstinencia o entregarse al desenfreno. Es optar entre la necesidad y la libertad, es elegir entre el celibato o la vida conyugal, entre gozar de los placeres mundanos y abtenerse de disfrutar descontroladamente. Su principio esencial es fortalecernos con los trabajos que nos ofrecen las fuerzas celestiales.
En las relaciones entre los sexos nos brinda privilegios, pero también nos muestra los deberes a cumplir. Nos augura la contraposición de fuerzas, habrá separaciones y divorcios. Los más profundos deseos pueden ser cumplidos, algunos de ellos serán satisfactorios, con otros nos sentiremos defraudados. Nos ofrece la posibilidad de conseguir todo aquello que se persiga.